Yo veo lo más profundo de tu ser. Ni siquiera uno de tus pensamientos escapa mi observación. Mi conocimiento íntimo de todo lo que tiene que ver contigo significa que nunca estás solo, tanto en los tiempos apacibles como en los tiempos turbulentos. También significa que quiero limpiar tus pensamientos de sus tendencias pecaminosas.

Cuando te encuentres pensando de una forma odiosa e hiriente, confiésamelo de inmediato. No me pidas solo que te perdone, sino que te cambie. No tienes que elaborar demasiado tu confesión, como si tuvieras que convencerme para que extienda mi gracia sobre ti. Yo pase a través de una tortuosa ejecución y la separación absoluta de mi Padre, por eso puedo echar tan lejos de ti tus transgresiones como lejos está el oriente del occidente. ¡Me deleito en perdonarte!

Recuerda que incluso ahora te veo vestido con radiantes vestiduras: mi perfecta justicia. Y ya puedo ver en ti la gloriosa visión que tendrás cuando el cielo se convierta en tu hogar. 

GÉNESIS 16:14; SALMOS 139:1,2; 2 CORINTIOS 5:21; SALMOS 103:12

Jesus Siempre – Sarah Young, 2017, Página 219.